La opción "No aplicar costes indirectos a partidas sin descomponer", accesible directamente en versiones anteriores a Presto 2012, se puede utilizar en Presto 2024 seleccionando el valor 'Sí' para la variable "CalcIndAlz" en la ventana subordinada "Valores" de la ventana "Variables".

Sin embargo, se trata en realidad de una anomalía, que da lugar a incompatibilidades entre unos presupuestos y otros y es innecesaria en casos reales.

El coste indirecto recoge todos los conceptos de gasto de una obra que no pueden aplicarse a unidades de obra específicas y por tanto se reparten proporcionalmente entre las unidades de obra certificables, figurando como un aumento lineal de los costes directos.

La normativa española de contratación pública exige expresamente su aplicación a todas las unidades de obra, sin exclusión.

Todos estos gastos... se cifrarán en un porcentaje de los costes directos, igual para todas las unidades de obra, que adoptará, en cada caso, el autor del proyecto a la vista de la naturaleza de la obra proyectada, de la importancia de su presupuesto y de su previsible plazo de ejecución.

No hay razón alguna para que una unidad de obra quede exenta de este porcentaje, siendo irrelevante que tenga o no descomposición, que es una mera justificación del coste unitario, que es siempre el coste directo. Si alguna unidad de obra, por esta o por cualquier otra causa, quedara exenta de la aplicación de este porcentaje, sería imposible calcular correctamente y cuadrar los importes de coste directo, coste indirecto y coste total con un porcentaje de costes indirectos.

Si por cualquier razón es necesario aplicar un criterio distinto, como pudiera ser también cuando se desea aplicar distintos porcentajes a distintas unidades de obra, se puede realizar sustituyendo el uso del porcentaje global por la introducción de porcentajes explícitos en cada descomposición, que se realiza, por ejemplo, con la opción "Herramientas: Partidas: Reestructurar".

En cuanto a la obra privada, el concepto de costes indirectos carece de significado desde el punto de vista del presupuesto, ya que cada licitador ofertará precios unitarios totales, sin que se conozca el desglose de costes directos y sobrecostes que haya decidido aplicar para obtenerlos.